Los vigilantes del Prat: 30 días de huelga sin impacto... pero no tiran la toalla

Los vigilantes de seguridad del aeropuerto de El Prat llevan en huelga 30 días consecutivos. La plantilla de Tablisa, concesionaria del servicio, está decidida a mantener unos paros con los que denuncia la misma sobrecarga laboral que hace dos años. Entonces, bajo el nombre de Eulen, protagonizó una protesta que derivó en colas de pasajeros, en quejas y en que la Guardia Civil asumiera el control de los filtros de seguridad de las instalaciones. El cumplimiento de servicios mínimos del 90%, sumado a la presencia del Instituto Armado en el arco para evitar que el ritmo de paso decaiga, genera malestar entre unos trabajadores que, sin embargo, aseguran estar más cerca de mantener la huelga que de tirar la toalla.

Los empleados de seguridad del segundo aeropuerto español no quieren dar su brazo a torcer. Pendiente de las decisiones del comité de huelga, la plantilla ha creado "una caja de resistencia" para ayudar económicamente a los 10 vigilantes que llevan un mes sin trabajar y sin cobrar. Los del comité de huelga son los únicos empleados privados de cumplir con los servicios mínimos. El resto va cada día al aeropuerto a inspeccionar bolsos de mano de viajeros.

MENOS COLAS QUE NUNCA

Los vigilantes destacan que ha habido menos colas este agosto que si no hubiera habido paros. El verano pasado, sin huelga, los filtros marchaban "con menor fluidez" que este año, asegura a este diario uno de ellos. "Se corre más hoy en día que antes de la huelga. Y eso comporta un riesgo de seguridad. ¿Prevalece la seguridad o la cola?", cuestionan desde el comité de huelga.

A la espera del desenlace de la fase judicial en la que ha entrado el conflicto, en el comité sostienen que la huelga puede alargarse. "Queremos, más que perjudicar a los usuarios del aeropuerto, luchar contra la sobrecarga de trabajo. Los paros pueden alargarse porque no se puede jugar con las familias, sino que debe abordarse un error de Aena y del propio Ministerio de Fomento, esté el PP o el PSOE en el Gobierno", indica a este periódico el asesor del comité de huelga, Juan Carlos Giménez.

"En comparativa con otros aeropuertos, Barcelona tiene unas ganancias altísimas. ¿Por qué se le sobrecarga laboralmente? Pronto puede empezar en El Prat la huelga de otro colectivo. En la explotación de los trabajadores está el quid de la cuestión de este conflicto".

"Hace dos años, los trabajadores no podíamos ir al servicio y alguno se desmayó tras jornadas de 10 horas sin descansos", recuerda un vigilante, que critica que algunos de sus compañeros trabajan "hasta 16 horas seguidas" en el arco de seguridad

Tres detenidos tras agredir a un vigilante de seguridad de un local de ocio en Roquetas de Mar (Almeria).

La Guardia Civil ha detenido como presuntos autores de un delito de lesiones graves a F.G.R., V.V.C. Y A P.C. de 32, 31 y 22 años, tres hombres que supuestamente golpearon al vigilante de seguridad de un local de ocio en Roquetas de Mar que tuvo que ser hospitalizado tras la agresión.

La Comandancia de Almería ha informado de que la víctima fue agredida en el establecimiento de Roquetas de Mar (Almería)en el que trabajaba, así como que la denuncia por estos presuntos hechos fue interpuesta por su mujer, quien indicó que el vigilante se encontraba en el hospital a la espera de ser intervenido quirúrgicamente.

Gracias a gestiones realizadas con «medios tecnológicos de última generación» fueron identificados dos de los agresores, que posteriormente fueron reconocidos por la víctima y testigos de los hechos, de forma que se inició un dispositivo que permitió la captura de F.G.R. y V.V.C.

Posteriormente y tras nuevas actuaciones dentro de la operación 'Varapalos', los agentes apresaron a P.C., el tercer supuesto implicado en la agresión, que como el resto quedó a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Roquetas de Mar.

Garrido lamenta las agresiones a los vigilantes de Metro y promete mejorar la seguridad de los trabajadores



El consejero de Transportes, Movilidad e Infraestructuras, Ángel Garrido, ha lamentado este jueves las agresiones "puntuales" que han sufrido los vigilantes del Metro de Madrid y ha asegurado que procurarán que estos trabajadores tengan "absolutas medidas de seguridad".

Garrido ha hecho estas declaraciones en Santa María de la Alameda tras visitar las obras de mantenimiento del firme que se están realizando en la M-505.

Alternativa Sindical ha presentado ante un juzgado una querella contra Metro de Madrid y las empresas de seguridad Trablisa y Ombuds por la agresión con arma blanca de unos grafiteros a un vigilante cuando fueron sorprendidos realizando pintadas en el depósito de trenes de Cuatro Vientos.

Sobre este asunto, el consejero ha afirmado que procurarán que todos los vigilantes y trabajadores tengan "absolutas medidas de seguridad".

Asimismo, ha recordado que siempre han pedido la colaboración de la Delegación de Gobierno que es quien tiene las competencias en materia de Policía Nacional y de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.

"Tratamos de que estén en las mejores condiciones posibles", ha señalado en referencia a los trabajadores que han sufrido "acontecimientos puntuales lamentables".

No obstante, ha indicado que la Delegación del Gobierno ya se ha "puesto manos a la obra" y no ha descartado mantener reuniones con esta institución para mejorar la situación por las "relaciones positivas" que mantienen con el fin de seguir con la "coordinación y las medidas necesarias" para mejorar la seguridad.

Denuncian a Metro tras agresión a vigilante que cubría a otro durante huelga

Alternativa Sindical ha presentado ante un juzgado una querella contra Metro de Madrid y las empresas de seguridad Trablisa y Ombuds por la agresión con arma blanca de unos grafiteros a un vigilante cuando fueron sorprendidos realizando pintadas en el depósito de trenes de Cuatro Vientos.

Según el sindicato, la vigilancia de ese depósito corresponde a la empresa adjudicataria Ombuds, cuyos trabajadores están en huelga indefinida desde agosto por impago de salarios, por lo que reprochan a Metro de Madrid que "esté cubriendo la ausencia de los trabajadores en huelga por vigilantes de otra empresa".

La denuncia ante el Juzgado de lo Social de Madrid por "vulneración de derechos fundamentales", en concreto del derecho a la huelga, ha sido presentada este miércoles contra las empresas Trablisa, Ombuds y Metro de Madrid.

Fuentes de la empresa del suburbano madrileño han asegurado a Efe que es "falso" que Metro de Madrid "esté vulnerando" el derecho de huelga de los vigilantes y cubra con personal de otras empresas las vacantes que puedan quedar por el personal en huelga.

Sobre la reyerta de ayer en la que un vigilante de la empresa Trablisa resultó herido por unos grafiteros, las mismas fuentes han explicado que, por contrato, todas las empresas de seguridad que trabajan con Metro (en la actualidad cuatro) "deben contar con un dispositivo especial de vigilancia para acudir a ayudar cuando hay una intrusión en un recinto o un ataque de grafiteros".

"En concreto", han añadido, "lo que pasó es que se avisó al equipo de vigilantes del dispositivo especial que estaba más cercano al incidente, que era el de la empresa Trablisa. Este equipo fue el que acudió al recinto de Cuatro Vientos para ayudar a frenar la acción de los grafiteros".

"Se pueden juntar vigilantes de varias empresas en estos casos", sostienen desde Metro de Madrid.

Esta agresión, perpetrada por unos grafiteros que huyeron pero que quedó grabada en las cámaras de seguridad del depósito, pone en evidencia que "el vigilante de Trablisa no debía estar ahí, ya que están cubriendo ilegalmente los descubiertos en la huelga", según Alternativa Sindical.

En la denuncia, indican que a las 14.50 del 3 de septiembre un grupo de tres grafiteros entraron en las instalaciones y agredieron a uno de los vigilantes de seguridad - de la empresa Trablisa- que estaba "cubriendo ilegalmente a los huelguistas de Ombuds en esta instalación, produciéndole un corte en el brazo, por lo que se solicita un indicativo a la sala del 091".

Los grafiteros portaban "palos, piedras y al menos un arma blanca. Producto del encuentro con los dos Vigilantes de Seguridad, uno de estos últimos resulta herido por impacto de un palo, mientras que otro recibe igualmente un impacto con un arma de este tipo, además de recibir tres cortes en el antebrazo y dos en el brazo por una navaja".

Alternativa Sindical critica que "estos trabajadores a los que ilegalmente metro de Madrid y Trablisa les hace cubrir descubiertos de la huelga", acabaron además heridos por los grafiteros que hicieron "una pintada de sesenta metros cuadrados en un tren que estaba estacionado en la vía uno, viéndose afectadas las composiciones (coches) números 6411, 6412, 6413, 6414".

El sindicato exige la Gerencia de Metro de Madrid "explique públicamente qué hacían vigilantes de la empresa Trablisa en un depósito de cuya seguridad está contratada la subcontrata Ombuds, y que actualmente se encuentra con sus trabajadores en huelga".

Un vigilante del Metro de Madrid, apuñalado con una navaja por unos grafiteros tras ser pillados

  • Los hechos sucedieron en el depósito de trenes de Cuatro Vientos y el trabajador ha sufrido lesiones leves en la mano y en la cara.
Un vigilante de seguridad del Metro de Madrid ha sido apuñalado con una navaja por un grupo de tres grafiteros. Los hechos han sucedido en el depósito de trenes de Cuatro Vientos y el trabajador ha sufrido heridas leves en la mano y en el brazo. Según han indicado a Europa Press fuentes de Metro Madrid, un grupo de tres personas han entrado alrededor de las 16 horas de del martes 3 de septiembre en el depósito de trenes con el objetivo de realizar pintadas en los vagones.

Así, han sido detectados por las cámaras de seguridad y un grupo de vigilantes ha intentado frenar al grupo que portaban una navaja y varios palos. Han conseguido retener a uno de ellos, que portaba el arma blanca, y que, al resistirse, ha provocado dos cortes a uno de los trabajador, mientras que otra grafitera ha golpeado en el brazo a otro de los efectivos de seguridad.

Como publica Madrid Diario, los agresores han conseguido huir y los vigilantes han sido atendidos por el Samur-Protección Civil y han sido trasladados a la mutua. Desde Metro de Madrid han señalado que cuentan con "medidas de seguridad disuasorias para evitar acciones" como las de este martes.

En esta línea, ha destacado que en 2018 frustraron 1.019 intentos de grafitis por el personal de seguridad, mientras que no se consiguieron parar otros 663. En esta línea, han destacado que tienen más de 8.000 cámaras repartidas por toda la red. Asimismo, han comunicado que han puesto a disposición de Policía Nacional las imágenes de las cámaras de vigilancia.