Comisiones Obreras informa de que los vigilantes de seguridad que prestan servicios en las distintas dependencias municipales(El Puerto de Santa Maria) manifiestan que a fecha de hoy no han cobrado sus nóminas correspondientes a la paga extra del mes de julio.
A finales del mes de junio, destacan en comunicado de prensa, los trabajadores recibieron una carta de la empresa de seguridad privada Prosetecnisa, adjudicataria del servicio, indicando que el Ayuntamiento mantiene una deuda con ellos y que este mes iba a tener problemas para abonar las nóminas. “En julio no cobramos hasta mediados de mes pero sólo el abono mensual, no la paga extra”, explican.
Desde que la empresa hizo el anuncio a los trabajadores, los responsables del sector de CCOO, Álvaro Montaño y Juan Cornejo, en un intento de mediar en el conflicto, mantuvieron una reunión con el concejal de Policía Local, Carlos Coronado, el cual se comprometió a enviar un pago, no todo el importe de la deuda pero sí parte, a la empresa a primeros del mes de julio.
“Según hemos comprobado, el pago se ha efectuado por parte del Consistorio. Tras un intento por parte del Ayuntamiento y Comisiones Obreras de ponerse en contacto con la empresa para mediar en el asunto, no hemos recibido respuesta alguna. Y los trabajadores siguen sin percibir su salario”, informan en comunicado de prensa.
Según la información recibida, sólo los trabajadores adscritos al Ayuntamiento siguen sin cobrar, ya que el resto de la plantilla de Prosetecnisa sí ha percibido el salario. Entienden por tanto que "se vuelve a repetir la misma estrategia empresarial del año pasado, utilizando el burdo chantaje de utilizar a los trabajadores para presionar al Ayuntamiento".
Ante la reiterada situación Comisiones Obreras va a convocar una manifestación ante el Consistorio el día 28 de este mes para reivindicar sus derechos.
Los sindicatos de seguridad privada critican que no sea obligatorio hacer trabajar en pareja a los agentes
Los sindicatos SIPVS y CC.OO. sostienen que así la agresión se podría haber minimizado o evitado; según UGT, se hubiera producido de todas formas, Renfe lamenta la muerte del vigilante y niega "rotundamente" las acusaciones de reducción de plantilla
La muerte del vigilante Rafael G. J. la mañana de este viernes en la estación de tren de Castelldefels ha generado un aluvión de críticas entre los diferentes sindicatos del sector en Catalunya, aunque no tienen una posición unánime. Según UGT, el mayoritario, lamentablemente la muerte se habría producido aunque la dotación de agentes hubiera sido mayor. CC.OO., en cambio, considera que con dos vigilantes "la agresión mortal se hubiera podido evitar" sin lugar a dudas y el independiente SIPVS va más allá y culpa a Renfe y Prosegur del fallecimiento por haber reducido la plantilla en la estación hace un año.
Pese a haber sido consultados por LV.es ni Renfe ni la empresa Prosegur han querido pronunciarse sobre esta acusación de insuficiencia de efectivos durante el suceso. "En primer lugar, lo más importante ahora es la familia de la persona fallecida y en segundo lugar, la investigación de los Mossos d'Esquadra", ha sostenido un portavoz de Renfe. "Las acusaciones que han lanzado algunos sindicatos son rotundamente falsas, como que se haya reducido la plantilla en Castelldefels. Todas las empresas tienen unos recursos, que se optimizan lo mejor posible para ofrecer el mejor servicio posible", ha manifestado la misma fuente.
El presunto recorte de gastos y agentes, según los sindicatos
El Sindicato Independiente de Profesionales de Vigilancia y Servicios de Catalunya (SIPVS) ha denunciado la mañana de este viernes que Renfe y la empresa de seguridad Prosegur, en la que trabajaba el vigilante fallecido, habrían reducido a la mitad la plantilla de agentes en la estación con el objetivo de recortar gastos. "Hace un año había dos agentes en la estación de Castelldefels, dotados de armas de fuego, pero para reducir los gastos se dejó a un único vigilante y sin arma", explica Pedro Oliva, gerente del sindicato, el segundo en representatividad en Catalunya. En la actualidad, según Oliva, los vigilantes utilizan como única protección personal una porra y unas esposas.
José Antonio Roldán, responsable de Seguridad Privada del sindicato CC.OO., el tercero en representatividad de este sector en Catalunya, ha declarado no tener conocimiento del recorte denunciado por SIPVS, pero ha asegurado que “las medidas de seguridad personal para los vigilantes privados no son suficientes”: “Indiscutiblemente se hubiera podido evitar con dos agentes, porque no es lo mismo repeler una agresión de uno contra uno, que hacerlo entre dos”, ha lamentado. Roldán se queja, además, de la falta de equiparación con la policía en lo que a medidas de protección personal se refiere: “No se entiende que la ley no obligue a que los vigilantes vayan, al menos, de dos en dos, si realizan tareas semejantes a las de los cuerpos policiales y a ellos sí se les hace patrullar en pareja”.
"Esto no hubiera sucedido si Prosegur y Renfe no hubieran hecho el recorte, porque el presunto asesino hubiera visto más gente, no se hubiera rebotado tanto y se habría marchado a su casa", juzga Oliva, que también es miembro del Comité de Empresa de Prosegur. "Y al final de su jornada, Rafael [la víctima] también hubiera podido regresar a su casa", añade. Rafael G. J. era un veterano de la vigilancia privada, "con diez años de experiencia como mínimo", según Oliva.
El gerente del SIPVS anuncia que su organización exigirá una investigación al Comité de Prevención de Riesgos Laborales, para que determine si además de un asesinato ha habido un accidente laboral. "Habrá que ver si este trabajador tenía todas las herramientas necesarias para realizar su labor y pedir a la Inspección de Trabajo que tome las medidas necesarias para que el personal de Seguridad Privada no quede desamparado por motivos económicos", sostiene. También avisa que la reducción de efectivos en las estaciones no es sólo un riesgo para la vida de los vigilantes, sino también para cualquier usuario del tren: "Por la estación de Castelldefels pasan miles de personas cada día, es incomprensible que haya un único agente para garantizar la seguridad de tantos pasajeros”.
José Antonio Roldán, de CC.OO., también considera que se trata de un accidente laboral, "porque el agente estaba en su lugar de trabajo", y que las investigaciones deberán determinar “si ha habido negligencia de la empresa contratante, del cliente y de las Administraciones”. También reivindica que hace años que su sindicato defiende el cambio legal y una protección extra para los vigilantes de transportes blindados, que a su juicio deberían dotarse de armas más potentes y chalecos antibala. “Hay una campaña generalizada –sostiene– para que se retiren las armas a los vigilantes, pero debe reflexionarse en qué sitios no hacen falta y en qué sitios sí”.
Según UGT, la muerte del vigilante no estaría vinculada al recorte
El sindicato mayoritario en la profesión, UGT, ha sostenido una postura menos contundente y ha considerado que la agresión al agente Rafael G. J. no ha sido directamente causada por la reducción de plantilla. “El agresor podía haber matado a la víctima tanto si era un agente como dos, porque el puñetazo mortal se lo hubiera podido dar igualmente”, ha asegurado Josep Gironès, responsable de la Federación de Servicios de UGT Catalunya.
No obstante, ha destacado que la tarea de los guardias de seguridad es un servicio público pese a depender de una contratación privada, por lo que “se les debe reconocer su función como agentes de la autoridad” y “garantizarse una contratación en mejores condiciones, para que su servicio pueda ser de más calidad”. “Pese a que es un trabajo con un cierto grado de peligrosidad física, podrían reducirse los riesgos si la Conselleria, el Ministerio del Interior y las empresas de seguridad ponen los recursos adecuados”, ha afirmado Gironès.
Los tres sindicatos, así como también la Federación de Trabajadores de la Seguridad Privada de la USOC (FTSP-USOC), han expresado su condena a la agresión y su apoyo a la familia de la víctima, a la que harán llegar su pésame.
La muerte del vigilante Rafael G. J. la mañana de este viernes en la estación de tren de Castelldefels ha generado un aluvión de críticas entre los diferentes sindicatos del sector en Catalunya, aunque no tienen una posición unánime. Según UGT, el mayoritario, lamentablemente la muerte se habría producido aunque la dotación de agentes hubiera sido mayor. CC.OO., en cambio, considera que con dos vigilantes "la agresión mortal se hubiera podido evitar" sin lugar a dudas y el independiente SIPVS va más allá y culpa a Renfe y Prosegur del fallecimiento por haber reducido la plantilla en la estación hace un año.
Pese a haber sido consultados por LV.es ni Renfe ni la empresa Prosegur han querido pronunciarse sobre esta acusación de insuficiencia de efectivos durante el suceso. "En primer lugar, lo más importante ahora es la familia de la persona fallecida y en segundo lugar, la investigación de los Mossos d'Esquadra", ha sostenido un portavoz de Renfe. "Las acusaciones que han lanzado algunos sindicatos son rotundamente falsas, como que se haya reducido la plantilla en Castelldefels. Todas las empresas tienen unos recursos, que se optimizan lo mejor posible para ofrecer el mejor servicio posible", ha manifestado la misma fuente.
El presunto recorte de gastos y agentes, según los sindicatos
El Sindicato Independiente de Profesionales de Vigilancia y Servicios de Catalunya (SIPVS) ha denunciado la mañana de este viernes que Renfe y la empresa de seguridad Prosegur, en la que trabajaba el vigilante fallecido, habrían reducido a la mitad la plantilla de agentes en la estación con el objetivo de recortar gastos. "Hace un año había dos agentes en la estación de Castelldefels, dotados de armas de fuego, pero para reducir los gastos se dejó a un único vigilante y sin arma", explica Pedro Oliva, gerente del sindicato, el segundo en representatividad en Catalunya. En la actualidad, según Oliva, los vigilantes utilizan como única protección personal una porra y unas esposas.
José Antonio Roldán, responsable de Seguridad Privada del sindicato CC.OO., el tercero en representatividad de este sector en Catalunya, ha declarado no tener conocimiento del recorte denunciado por SIPVS, pero ha asegurado que “las medidas de seguridad personal para los vigilantes privados no son suficientes”: “Indiscutiblemente se hubiera podido evitar con dos agentes, porque no es lo mismo repeler una agresión de uno contra uno, que hacerlo entre dos”, ha lamentado. Roldán se queja, además, de la falta de equiparación con la policía en lo que a medidas de protección personal se refiere: “No se entiende que la ley no obligue a que los vigilantes vayan, al menos, de dos en dos, si realizan tareas semejantes a las de los cuerpos policiales y a ellos sí se les hace patrullar en pareja”.
"Esto no hubiera sucedido si Prosegur y Renfe no hubieran hecho el recorte, porque el presunto asesino hubiera visto más gente, no se hubiera rebotado tanto y se habría marchado a su casa", juzga Oliva, que también es miembro del Comité de Empresa de Prosegur. "Y al final de su jornada, Rafael [la víctima] también hubiera podido regresar a su casa", añade. Rafael G. J. era un veterano de la vigilancia privada, "con diez años de experiencia como mínimo", según Oliva.
El gerente del SIPVS anuncia que su organización exigirá una investigación al Comité de Prevención de Riesgos Laborales, para que determine si además de un asesinato ha habido un accidente laboral. "Habrá que ver si este trabajador tenía todas las herramientas necesarias para realizar su labor y pedir a la Inspección de Trabajo que tome las medidas necesarias para que el personal de Seguridad Privada no quede desamparado por motivos económicos", sostiene. También avisa que la reducción de efectivos en las estaciones no es sólo un riesgo para la vida de los vigilantes, sino también para cualquier usuario del tren: "Por la estación de Castelldefels pasan miles de personas cada día, es incomprensible que haya un único agente para garantizar la seguridad de tantos pasajeros”.
José Antonio Roldán, de CC.OO., también considera que se trata de un accidente laboral, "porque el agente estaba en su lugar de trabajo", y que las investigaciones deberán determinar “si ha habido negligencia de la empresa contratante, del cliente y de las Administraciones”. También reivindica que hace años que su sindicato defiende el cambio legal y una protección extra para los vigilantes de transportes blindados, que a su juicio deberían dotarse de armas más potentes y chalecos antibala. “Hay una campaña generalizada –sostiene– para que se retiren las armas a los vigilantes, pero debe reflexionarse en qué sitios no hacen falta y en qué sitios sí”.
Según UGT, la muerte del vigilante no estaría vinculada al recorte
El sindicato mayoritario en la profesión, UGT, ha sostenido una postura menos contundente y ha considerado que la agresión al agente Rafael G. J. no ha sido directamente causada por la reducción de plantilla. “El agresor podía haber matado a la víctima tanto si era un agente como dos, porque el puñetazo mortal se lo hubiera podido dar igualmente”, ha asegurado Josep Gironès, responsable de la Federación de Servicios de UGT Catalunya.
No obstante, ha destacado que la tarea de los guardias de seguridad es un servicio público pese a depender de una contratación privada, por lo que “se les debe reconocer su función como agentes de la autoridad” y “garantizarse una contratación en mejores condiciones, para que su servicio pueda ser de más calidad”. “Pese a que es un trabajo con un cierto grado de peligrosidad física, podrían reducirse los riesgos si la Conselleria, el Ministerio del Interior y las empresas de seguridad ponen los recursos adecuados”, ha afirmado Gironès.
Los tres sindicatos, así como también la Federación de Trabajadores de la Seguridad Privada de la USOC (FTSP-USOC), han expresado su condena a la agresión y su apoyo a la familia de la víctima, a la que harán llegar su pésame.
Muere un vigilante de Renfe en Castelldefels tras la agresión de un viajero
Un vigilante de seguridad de la empresa Prosegur, contratada por Renfe, ha resultado muerto a primeras horas de la mañana en la estación de Castelldefels (Barcelona) tras ser agredido por un joven que viajaba en el tren y que se ha enfrentado a varios pasajeros antes de que interviniera la víctima.
Según los Mossos d'Esquadra el vigilante "ha muerto como consecuencia de la agresión". Un comunicado de la institución revela que el presunto autor del homicidio, Sergio M.G. un joven español de 20 años y vecino de Castelldefels, ha sido detenido por efectivos de la policía local en la misma estación y trasladado a las dependencias de Gavá.
Fuentes del Sistema de Emergencias Médicas (SEM) han explicado que el personal médico de las dos ambulancias desplazadas al lugar ha intentado reanimar a la víctima, Rafael G.J. de 44 años y padre de un niño, con resultados negativos.
Las primeras informaciones suministradas por algunos testigos dan cuenta de que el agresor viajaba en el tren, donde ya había provocado altercados e incidentes a otros viajeros.
Al bajar en Castelldefels, el agresor ha continuado fastidiando a los pasajeros y el vigilante le ha recriminado su actitud. Ha sido entonces cuando ha comenzado una pelea entre los dos y una persecución por el interior del recinto de la estación, que el agresor ha abandonado saltando una de las vallas.
En el exterior de la estación ha continuado la discusión y la posterior agresión que ha acabado con la muerte del vigilante.
El alcalde de Castelldefels, Joan Sau, se ha mostrado consternado y ha dado "su pésame" a la familia y a los compañeros de la víctima.
"Es un hecho muy lamentable y triste", ha dicho el alcalde, que ha destacado la "rápida y eficaz" actuación de la policía local, que ha sido la que ha practicado la detención. Según el alcalde, el agresor es "conocido" en la ciudad.
Entre tanto, el responsable del Bar Boga Boga, Antonio, ha explicado que en el momento del suceso limpiaba la parte trasera de establecimiento. "Me han sobresaltado los gritos y los golpes. He salido y he visto a dos chicos pelarse. Después me he ido a atender a un repartidor y, cuando he vuelto, el vigilante ya estaba en el suelo", ha dicho. Asegura que la víctima "era muy conocida y una persona muy amable y afable".
El responsable del bar Guetxo, muy próximo a la estación, ha explicado que "se ha oído un ruido muy fuerte, muchos golpes y gritos" y ha apuntado que "algunos de los viajeros que había en aquel momento han retenido al agresor hasta que ha llegado la policía local".
Una de las personas que ha contribuido a retener al agresor ha sido el repartidor de periódicos gratuitos que cada mañana trabaja en la zona. "Se ha ido muy afectado", han dicho testigos de los hechos.
La crisis y la reducción de personal
Por su parte, el gerente del Sindicato Independiente de Profesionales de la Vigilancia y Servicios de Catalunya, Pedro Luis Oliva, ha denunciado que el recorte de presupuesto por parte de Renfe ha limitado el número de vigilantes en esa estación considerada una de las más problemáticas por la afluencia de usuarios.
Oliva ha dicho que en la citada estación habían dos vigilantes y que como consecuencia de la reducción de presupuesto sólo ha quedado uno para atender el servicio de vigilancia.
"Pero, además, este vigilante de seguridad, solo tiene para defender a los usuarios y para defenderse así mismo, una defensa (porra) y unos grilletes (esposas). Veremos si la Inspección de Trabajo toma las medidas necesarias para que el personal de seguridad privada no quede desamparado ante actos como estos, única y exclusivamente por motivos económicos", ha añadido.
Oliva también ha destacado que la victima llevaba como mínimo 10 años prestando sus servicios a la empresa Prosegur.
Los Mossos d'Esquadra del Área Territorial de Investigación de la Región Metropolitana Sur, que ya están observando las cámaras de seguridad de la estación, se han hecho cargo de las primeras pesquisas para esclarecer los hechos.
Según los Mossos d'Esquadra el vigilante "ha muerto como consecuencia de la agresión". Un comunicado de la institución revela que el presunto autor del homicidio, Sergio M.G. un joven español de 20 años y vecino de Castelldefels, ha sido detenido por efectivos de la policía local en la misma estación y trasladado a las dependencias de Gavá.
Fuentes del Sistema de Emergencias Médicas (SEM) han explicado que el personal médico de las dos ambulancias desplazadas al lugar ha intentado reanimar a la víctima, Rafael G.J. de 44 años y padre de un niño, con resultados negativos.
Las primeras informaciones suministradas por algunos testigos dan cuenta de que el agresor viajaba en el tren, donde ya había provocado altercados e incidentes a otros viajeros.
Al bajar en Castelldefels, el agresor ha continuado fastidiando a los pasajeros y el vigilante le ha recriminado su actitud. Ha sido entonces cuando ha comenzado una pelea entre los dos y una persecución por el interior del recinto de la estación, que el agresor ha abandonado saltando una de las vallas.
En el exterior de la estación ha continuado la discusión y la posterior agresión que ha acabado con la muerte del vigilante.
El alcalde de Castelldefels, Joan Sau, se ha mostrado consternado y ha dado "su pésame" a la familia y a los compañeros de la víctima.
"Es un hecho muy lamentable y triste", ha dicho el alcalde, que ha destacado la "rápida y eficaz" actuación de la policía local, que ha sido la que ha practicado la detención. Según el alcalde, el agresor es "conocido" en la ciudad.
Entre tanto, el responsable del Bar Boga Boga, Antonio, ha explicado que en el momento del suceso limpiaba la parte trasera de establecimiento. "Me han sobresaltado los gritos y los golpes. He salido y he visto a dos chicos pelarse. Después me he ido a atender a un repartidor y, cuando he vuelto, el vigilante ya estaba en el suelo", ha dicho. Asegura que la víctima "era muy conocida y una persona muy amable y afable".
El responsable del bar Guetxo, muy próximo a la estación, ha explicado que "se ha oído un ruido muy fuerte, muchos golpes y gritos" y ha apuntado que "algunos de los viajeros que había en aquel momento han retenido al agresor hasta que ha llegado la policía local".
Una de las personas que ha contribuido a retener al agresor ha sido el repartidor de periódicos gratuitos que cada mañana trabaja en la zona. "Se ha ido muy afectado", han dicho testigos de los hechos.
La crisis y la reducción de personal
Por su parte, el gerente del Sindicato Independiente de Profesionales de la Vigilancia y Servicios de Catalunya, Pedro Luis Oliva, ha denunciado que el recorte de presupuesto por parte de Renfe ha limitado el número de vigilantes en esa estación considerada una de las más problemáticas por la afluencia de usuarios.
Oliva ha dicho que en la citada estación habían dos vigilantes y que como consecuencia de la reducción de presupuesto sólo ha quedado uno para atender el servicio de vigilancia.
"Pero, además, este vigilante de seguridad, solo tiene para defender a los usuarios y para defenderse así mismo, una defensa (porra) y unos grilletes (esposas). Veremos si la Inspección de Trabajo toma las medidas necesarias para que el personal de seguridad privada no quede desamparado ante actos como estos, única y exclusivamente por motivos económicos", ha añadido.
Oliva también ha destacado que la victima llevaba como mínimo 10 años prestando sus servicios a la empresa Prosegur.
Los Mossos d'Esquadra del Área Territorial de Investigación de la Región Metropolitana Sur, que ya están observando las cámaras de seguridad de la estación, se han hecho cargo de las primeras pesquisas para esclarecer los hechos.
Los vigilantes del metro denuncian las amenazas y agresiones constantes de los carteristas
El metro es la jungla de los carteristas”, dice el responsable sectorial de seguridad privada de la Unión General de Trabajadores (UGT), Juan Antonio Ramos, refiriéndose a la ola de robos en el subsuelo de Barcelona y a la impunidad con la que actúan los hurtadores. Los vigilantes de seguridad – unos 300, según estima UGT- de las empresas Prosegur, Securitas y Eulen desplegados por la red del metro en diferentes turnos lidian cada día con unos 150 ladrones que frecuentan estaciones y vagones, una tarea complicada y arriesgada. Denuncian insultos, amenazas constantes, agresiones e, incluso, persecuciones por parte de los delincuentes. “Se ha dado el caso de que el carterista llega a perseguir al vigilante hasta su domicilio para intimidarlo”, comenta Ramos. Y a veces llegan a las manos. Las acciones violentas contra vigilantes “no son un hecho aislado ya que ocurren a menudo”, señala el secretario general de seguridad privada de la Unión Sindical Obrera de Catalunya (USOC), José Paz Iglesias. En este sentido los sindicatos calculan que cada semana se producen entre cuatro y seis agresiones físicas - no sólo de ladrones- a guardas de seguridad en el transporte público de Barcelona, aunque a veces estas cifras se superan.
La secuencia hasta las acometidas siempre suele ser la misma. En un primer momento, intentan escapar por todos los medios de ser retenidos por el personal de seguridad, pero frustrado este objetivo, no dudan en sacar una navaja, un puño americano o un machete. “Los carteristas siempre son los mismos porque no van a la cárcel ni se les expulsa. Es lógico. Si les cortamos el paso cada vez que quieren entrar, al final acaban enfrentándose a nosotros, agrediéndonos porque piensan que les estamos fastidiando su trabajo”, explica Iglesias. La mayoría son bandas organizadas, algunas de ellas muy peligrosas. La batalla a la que se enfrentan cada día estos trabajadores está haciendo mella en su salud y su resistencia psíquica, según denuncia Ignacio Arroyo, secretario de organización del Sindicato Profesional de Seguridad Privada (SPS) y miembro del comité de empresa de Prosegur. “La cantidad de bajas laborales – por agresiones y depresiones- que hay entre los vigilantes de los transportes públicos de Barcelona es una barbaridad”, asegura.
Los vigilantes reclaman más efectivos en el metro
Como posible solución al problema los sindicatos exigen aumentar los efectivos de vigilancia en el subsuelo urbano de Barcelona, donde se produce la mayor concentración de incidencias en materia de seguridad en los transportes públicos del área metropolitana. “Sólo hay un 25% de los guardias de seguridad de los que debería de haber”, se lamenta el responsable sectorial de seguridad privadad de Comisiones Obreras (CC.OO), José Antonio Roldán. La reducida plantilla fuerza cada vez más al personal a patrullar en solitario. “He visto compañeros ir solos en un vagón y tenerse que enfrentar sin efectivos de refuerzo al delincuente de turno”, comenta. Fuentes del comité de empresa de Prosegur también critican el hecho de que se hayan incrementado “los agentes únicos”, lo que “genera más conflicto porque éstos no pueden plantar cara a un grupo numeroso de personas”. En esta línea, la USOC reclama aumentar “el número de unidades caninas” y que se suprima “el patrullaje en solitario”.
Por su parte, Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) asegura que no puede facilitar el número de vigilantes de seguridad del metro porque las cifras fluctúan diariamente en función de las festividades y los eventos que acoja la ciudad y porque contrata los servicios “por horas”.
Los sinsabores de ir a la caza del carterista
En el supuesto de que el vigilante coja al ladrón ‘in fraganti’, lo retendrá hasta que lleguen los Mossos d’Esquadra para identificarlo, pero si éstos ven que no tiene antecedentes ni ningún juzgado lo reclama por un caso pendiente, lo dejan en libertad. El personal de seguridad se siente impotente delante de esta situación. Por eso, el sector comparte la reclamación de un cambio legislativo que facilite el encarcelamiento o la expulsión de las bandas organizadas en caso de que sus miembros sean reincidentes. Pero las modificaciones normativas que piden los vigilantes no acaban aquí. También se sienten indefensos porque la ley no les considera con “carácter de agentes de la autoridad”, lo cual marca una diferencia notable con respecto a los cuerpos policiales. Si un usuario del metro atenta contra un vigilante se le puede atribuir una falta o un delito por lesiones – dependiendo de si la lesión requiere o no un seguimiento médico superior al día- , mientras que si se trata de un agente, el atacante también es acusado de un delito de atentado y desobediencia contra la autoridad.
“Difícilmente puedes ofrecer seguridad si tú mismo no la tienes”, comenta el responsable sectorial de seguridad privada de CC.OO. Los vigilantes reivindican un cambio de la Ley 23/1992, de 30 de junio, de Seguridad Privada, para que incluya el carácter de agente de la autoridad en el desempeño de las funciones de vigilante. El sector ha acogido positivamente la ley Ómnibus que debatirá en breve el parlamento catalán, porque la norma reconoce a estos trabajadores la condición de agentes de la autoridad como colaboradores de los cuerpos de policía de Catalunya cuando presten servicio en infraestructuras de transporte público.
La secuencia hasta las acometidas siempre suele ser la misma. En un primer momento, intentan escapar por todos los medios de ser retenidos por el personal de seguridad, pero frustrado este objetivo, no dudan en sacar una navaja, un puño americano o un machete. “Los carteristas siempre son los mismos porque no van a la cárcel ni se les expulsa. Es lógico. Si les cortamos el paso cada vez que quieren entrar, al final acaban enfrentándose a nosotros, agrediéndonos porque piensan que les estamos fastidiando su trabajo”, explica Iglesias. La mayoría son bandas organizadas, algunas de ellas muy peligrosas. La batalla a la que se enfrentan cada día estos trabajadores está haciendo mella en su salud y su resistencia psíquica, según denuncia Ignacio Arroyo, secretario de organización del Sindicato Profesional de Seguridad Privada (SPS) y miembro del comité de empresa de Prosegur. “La cantidad de bajas laborales – por agresiones y depresiones- que hay entre los vigilantes de los transportes públicos de Barcelona es una barbaridad”, asegura.
Los vigilantes reclaman más efectivos en el metro
Como posible solución al problema los sindicatos exigen aumentar los efectivos de vigilancia en el subsuelo urbano de Barcelona, donde se produce la mayor concentración de incidencias en materia de seguridad en los transportes públicos del área metropolitana. “Sólo hay un 25% de los guardias de seguridad de los que debería de haber”, se lamenta el responsable sectorial de seguridad privadad de Comisiones Obreras (CC.OO), José Antonio Roldán. La reducida plantilla fuerza cada vez más al personal a patrullar en solitario. “He visto compañeros ir solos en un vagón y tenerse que enfrentar sin efectivos de refuerzo al delincuente de turno”, comenta. Fuentes del comité de empresa de Prosegur también critican el hecho de que se hayan incrementado “los agentes únicos”, lo que “genera más conflicto porque éstos no pueden plantar cara a un grupo numeroso de personas”. En esta línea, la USOC reclama aumentar “el número de unidades caninas” y que se suprima “el patrullaje en solitario”.
Por su parte, Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) asegura que no puede facilitar el número de vigilantes de seguridad del metro porque las cifras fluctúan diariamente en función de las festividades y los eventos que acoja la ciudad y porque contrata los servicios “por horas”.
Los sinsabores de ir a la caza del carterista
En el supuesto de que el vigilante coja al ladrón ‘in fraganti’, lo retendrá hasta que lleguen los Mossos d’Esquadra para identificarlo, pero si éstos ven que no tiene antecedentes ni ningún juzgado lo reclama por un caso pendiente, lo dejan en libertad. El personal de seguridad se siente impotente delante de esta situación. Por eso, el sector comparte la reclamación de un cambio legislativo que facilite el encarcelamiento o la expulsión de las bandas organizadas en caso de que sus miembros sean reincidentes. Pero las modificaciones normativas que piden los vigilantes no acaban aquí. También se sienten indefensos porque la ley no les considera con “carácter de agentes de la autoridad”, lo cual marca una diferencia notable con respecto a los cuerpos policiales. Si un usuario del metro atenta contra un vigilante se le puede atribuir una falta o un delito por lesiones – dependiendo de si la lesión requiere o no un seguimiento médico superior al día- , mientras que si se trata de un agente, el atacante también es acusado de un delito de atentado y desobediencia contra la autoridad.
“Difícilmente puedes ofrecer seguridad si tú mismo no la tienes”, comenta el responsable sectorial de seguridad privada de CC.OO. Los vigilantes reivindican un cambio de la Ley 23/1992, de 30 de junio, de Seguridad Privada, para que incluya el carácter de agente de la autoridad en el desempeño de las funciones de vigilante. El sector ha acogido positivamente la ley Ómnibus que debatirá en breve el parlamento catalán, porque la norma reconoce a estos trabajadores la condición de agentes de la autoridad como colaboradores de los cuerpos de policía de Catalunya cuando presten servicio en infraestructuras de transporte público.
Agentes de seguridad privada del aeropuerto de Sevilla convocan huelga los días 15, 16 y 17 para pedir mejores condiciones
Los agentes de seguridad del aeropuerto de Sevilla de la empresa privada Trablisa se han declarado en huelga los días 15, 16 y 17 de julio, según han anunciado fuentes del sindicato CSIF, que precisa que estos empleados demandan que "se mejoren nuestras condiciones de trabajo, pues así mejoraran las del usuario".
Las fuentes sindicales han declarado a Europa Press que "los trabajadores han intentado negociar con la empresa en muchas ocasiones pero sin ningún resultado" y recuerdan que lo que quieren conseguir con esta huelga es que Trablisa "rectifique varios reglamentos, procedimientos y, sobre todo, contra el convenio de seguridad privada" y han asegurado que "por ahora la empresa ha hecho caso omiso".
Los trabajadores han manifestado que "se han empeorado las condiciones de trabajo", ante lo que quieren "negociar".
No obstante, han advertido de que si no se hace caso a sus peticiones, harán otra huelga en el mes de agosto. Además aseguran que "todo viene desde el año pasado y que no van a esperar más tiempo".
De esta forma, la huelga se va a realizar los días 15, 16 y 17 de julio, días en los que habrá servicios mínimos sobre el 65 por ciento.
Los agentes de seguridad privada en huelga se situarán en el túnel de salida de pasajeros, con pancartas y con todo el personal, para que "los pasajeros sepan de nuestra situación". "No queremos imponer nada a la empresa, lo único que queremos es que cumplan los acuerdos", han aseverado.
Fuente: Europa Press
Las fuentes sindicales han declarado a Europa Press que "los trabajadores han intentado negociar con la empresa en muchas ocasiones pero sin ningún resultado" y recuerdan que lo que quieren conseguir con esta huelga es que Trablisa "rectifique varios reglamentos, procedimientos y, sobre todo, contra el convenio de seguridad privada" y han asegurado que "por ahora la empresa ha hecho caso omiso".
Los trabajadores han manifestado que "se han empeorado las condiciones de trabajo", ante lo que quieren "negociar".
No obstante, han advertido de que si no se hace caso a sus peticiones, harán otra huelga en el mes de agosto. Además aseguran que "todo viene desde el año pasado y que no van a esperar más tiempo".
De esta forma, la huelga se va a realizar los días 15, 16 y 17 de julio, días en los que habrá servicios mínimos sobre el 65 por ciento.
Los agentes de seguridad privada en huelga se situarán en el túnel de salida de pasajeros, con pancartas y con todo el personal, para que "los pasajeros sepan de nuestra situación". "No queremos imponer nada a la empresa, lo único que queremos es que cumplan los acuerdos", han aseverado.
Fuente: Europa Press
Agentes de seguridad privada del aeropuerto (Sevilla) convocan huelga los días 15, 16 y 17 para pedir mejores condiciones
Los agentes de seguridad del aeropuerto de Sevilla de la empresa privada Trablisa se han declarado en huelga los días 15, 16 y 17 de julio, según han anunciado fuentes del sindicato CSIF, que precisa que estos empleados demandan que "se mejoren nuestras condiciones de trabajo, pues así mejoraran las del usuario".
Las fuentes sindicales han declarado a Europa Press que "los trabajadores han intentado negociar con la empresa en muchas ocasiones pero sin ningún resultado" y recuerdan que lo que quieren conseguir con esta huelga es que Trablisa "rectifique varios reglamentos, procedimientos y, sobre todo, contra el convenio de seguridad privada" y han asegurado que "por ahora la empresa ha hecho caso omiso".
Los trabajadores han manifestado que "se han empeorado las condiciones de trabajo", ante lo que quieren "negociar".
No obstante, han advertido de que si no se hace caso a sus peticiones, harán otra huelga en el mes de agosto. Además aseguran que "todo viene desde el año pasado y que no van a esperar más tiempo".
De esta forma, la huelga se va a realizar los días 15, 16 y 17 de julio, días en los que habrá servicios mínimos sobre el 65 por ciento.
Los agentes de seguridad privada en huelga se situarán en el túnel de salida de pasajeros, con pancartas y con todo el personal, para que "los pasajeros sepan de nuestra situación". "No queremos imponer nada a la empresa, lo único que queremos es que cumplan los acuerdos", han aseverado.
Fuente: Europa Press
Las fuentes sindicales han declarado a Europa Press que "los trabajadores han intentado negociar con la empresa en muchas ocasiones pero sin ningún resultado" y recuerdan que lo que quieren conseguir con esta huelga es que Trablisa "rectifique varios reglamentos, procedimientos y, sobre todo, contra el convenio de seguridad privada" y han asegurado que "por ahora la empresa ha hecho caso omiso".
Los trabajadores han manifestado que "se han empeorado las condiciones de trabajo", ante lo que quieren "negociar".
No obstante, han advertido de que si no se hace caso a sus peticiones, harán otra huelga en el mes de agosto. Además aseguran que "todo viene desde el año pasado y que no van a esperar más tiempo".
De esta forma, la huelga se va a realizar los días 15, 16 y 17 de julio, días en los que habrá servicios mínimos sobre el 65 por ciento.
Los agentes de seguridad privada en huelga se situarán en el túnel de salida de pasajeros, con pancartas y con todo el personal, para que "los pasajeros sepan de nuestra situación". "No queremos imponer nada a la empresa, lo único que queremos es que cumplan los acuerdos", han aseverado.
Fuente: Europa Press
La Fiscalía pide 15 años de cárcel para la banda que golpeo al Vigilante de Seguridad de Logista
El 10 de agosto del año pasado, una banda de atracadores entró por la fuerza en las instalaciones de Logista, la empresa que distribuye el tabaco a los estancos de la provincia.
Eran las 3 de la madrugada y la alarma se disparó, dando el aviso a la empresa de vigilancia que custodiaba las instalaciones. Poco después, un vigilante se acercó al lugar, pero los delincuentes detectaron su presencia y comenzaron a golpearlo de forma violenta. Luego lo esposaron, le taparon la cara y le obligaron a comunicarse con la central varias veces para informar de que todo estaba en orden.
La agresión fue brutal y el vigilante necesitó atención médica durante casi medio año, unos hechos que van a ser dilucidados en el juicio que celebrará mañana la Audiencia Provincial de Badajoz. En el banquillo se sentarán dos ciudadanos rumanos detenidos por su presunta participación en los hechos.
El relato realizado por la Fiscalía explica que ese delito fue cometido el 10 de agosto del pasado año. Aquella madrugada, una banda de delincuentes logró apoderarse de 38 cajones de tabaco de la marca Marlboro valorados en 73.150 euros propiedad de Logista H10, la empresa que tienen sus instalaciones en la calle Joaquín Sánchez Valverde del polígono El Nevero.
La diferencia entre este robo y otros ocurridos con anterioridad en estas mismas instalaciones estriba en que los delincuentes fueron sorprendidos por el vigilante, con quien la emprendieron a golpes sirviéndose de palos y otros instrumentos similares. «Igualmente, y por un período de más de 90 minutos, neutralizaron la capacidad deambulatoria del mismo, esposándolo y tapándole la cara con una prenda».
La fiscalía añade que los ladrones usaron el Nissan Micra que utilizaba el vigilante, propiedad de la empresa Segurex, para empotrarlo contra el almacén del que sustrajeron el tabaco. Más tarde,usaron ese mismo coche para huir a Toledo, donde apareció el vehículo un día después en situación de siniestro total.
Gestiones realizadas por el Cuerpo Nacional de Policía permitieron detener a Marian C. y Vasile D. como presuntos participantes en los hechos descritos. Ambos son rumanos y se enfrentan mañana a una petición de pena que asciende a 15 años.
La Fiscalía los encuentra culpables de un delito de robo con violencia o intimidación, otro de lesiones y un tercer delito de detención ilegal. Para cada una de las acusaciones pide una pena de prisión de 5 años, por lo que solicita un total de 15 años de cárcel para cada uno de los detenidos.
Igualmente propone que indemnicen al vigilante de seguridad atacado con 8.760 euros por las lesiones causadas; que entreguen otros 4.840 euros a Segurex por el vehículo; y que paguen casi 80.000 euros a Logista H10 por el tabaco sustraído y los daños provocados en las instalaciones.
Fuente:Hoy.es
Eran las 3 de la madrugada y la alarma se disparó, dando el aviso a la empresa de vigilancia que custodiaba las instalaciones. Poco después, un vigilante se acercó al lugar, pero los delincuentes detectaron su presencia y comenzaron a golpearlo de forma violenta. Luego lo esposaron, le taparon la cara y le obligaron a comunicarse con la central varias veces para informar de que todo estaba en orden.
La agresión fue brutal y el vigilante necesitó atención médica durante casi medio año, unos hechos que van a ser dilucidados en el juicio que celebrará mañana la Audiencia Provincial de Badajoz. En el banquillo se sentarán dos ciudadanos rumanos detenidos por su presunta participación en los hechos.
El relato realizado por la Fiscalía explica que ese delito fue cometido el 10 de agosto del pasado año. Aquella madrugada, una banda de delincuentes logró apoderarse de 38 cajones de tabaco de la marca Marlboro valorados en 73.150 euros propiedad de Logista H10, la empresa que tienen sus instalaciones en la calle Joaquín Sánchez Valverde del polígono El Nevero.
La diferencia entre este robo y otros ocurridos con anterioridad en estas mismas instalaciones estriba en que los delincuentes fueron sorprendidos por el vigilante, con quien la emprendieron a golpes sirviéndose de palos y otros instrumentos similares. «Igualmente, y por un período de más de 90 minutos, neutralizaron la capacidad deambulatoria del mismo, esposándolo y tapándole la cara con una prenda».
La fiscalía añade que los ladrones usaron el Nissan Micra que utilizaba el vigilante, propiedad de la empresa Segurex, para empotrarlo contra el almacén del que sustrajeron el tabaco. Más tarde,usaron ese mismo coche para huir a Toledo, donde apareció el vehículo un día después en situación de siniestro total.
Gestiones realizadas por el Cuerpo Nacional de Policía permitieron detener a Marian C. y Vasile D. como presuntos participantes en los hechos descritos. Ambos son rumanos y se enfrentan mañana a una petición de pena que asciende a 15 años.
La Fiscalía los encuentra culpables de un delito de robo con violencia o intimidación, otro de lesiones y un tercer delito de detención ilegal. Para cada una de las acusaciones pide una pena de prisión de 5 años, por lo que solicita un total de 15 años de cárcel para cada uno de los detenidos.
Igualmente propone que indemnicen al vigilante de seguridad atacado con 8.760 euros por las lesiones causadas; que entreguen otros 4.840 euros a Segurex por el vehículo; y que paguen casi 80.000 euros a Logista H10 por el tabaco sustraído y los daños provocados en las instalaciones.
Fuente:Hoy.es
Detenido por agredir a un Vigilante de Seguridad en la estación de tren
La Policía Nacional ha detenido a un joven, de 26 años, por agredir a un vigilante de seguridad y encontrarse en situación irregular, en la Estación de ferrocarril de la Plaza La Bohemia.
El vigilante que viajaba en el tren observó como una mujer avisaba a su pareja, un hombre que estaba dormido, de que el tren se había parado porque habían llegado a Gijón.
Al despertarse reaccionó violentamente dando un empujón a la mujer y tirándola contra los asientos. La mujer contestó a la agresión dándole a su vez un tortazo. El vigilante observando la discusión y las mutuas acometidas trató de mediar en la discusión y que cesasen en su violenta actitud.
Lejos de ello, el joven agredió al vigilante alentado por tres amigos que esperaban en el andén y que increparon al vigilante para que no se metiera en la relación, por lo que tuvo que intervenir otro compañero de seguridad y los agentes policiales.
Identificaron a todos los presentes y procedieron a la detención del agresor de origen boliviano por encontrase en situación irregular en España. Se dio cuenta a la Autoridad Judicial de la actitud violenta mantenida por la pareja.
Fuente:Europa Press
El vigilante que viajaba en el tren observó como una mujer avisaba a su pareja, un hombre que estaba dormido, de que el tren se había parado porque habían llegado a Gijón.
Al despertarse reaccionó violentamente dando un empujón a la mujer y tirándola contra los asientos. La mujer contestó a la agresión dándole a su vez un tortazo. El vigilante observando la discusión y las mutuas acometidas trató de mediar en la discusión y que cesasen en su violenta actitud.
Lejos de ello, el joven agredió al vigilante alentado por tres amigos que esperaban en el andén y que increparon al vigilante para que no se metiera en la relación, por lo que tuvo que intervenir otro compañero de seguridad y los agentes policiales.
Identificaron a todos los presentes y procedieron a la detención del agresor de origen boliviano por encontrase en situación irregular en España. Se dio cuenta a la Autoridad Judicial de la actitud violenta mantenida por la pareja.
Fuente:Europa Press
Sanción a la empresa en la que trabajaba un vigilante asesinado
Cuatro años después del crimen de un joven vigilante en Mos, y casi dos desde que los culpables fueron juzgados y condenados, la Audiencia Nacional acaba de desestimar un recurso presentado por la empresa para la que trabajaba confirmando así una sanción de 90.000 euros por una infracción a la Ley de Seguridad Privada.
Según consta en el fallo de la sala de lo Contencioso, este proceso se inicia a raíz del crimen del vigilante que trabajaba para dicha empresa. Tras los sucesos, acontecidos en 2007, se abrió una investigación interna para aclarar si la empresa estaba prestando servicios de vigilancia sin estar autorizada para ello.
Tras tomar declaración al responsable de la empresa ser ordena también el interrogatorio a los compañeros del fallecido quienes manifiestan que su trabajo consiste en recoger un vehículo de la empresa para la que se ofrecía el servicio en la nave de Mos y con él realizar rondas de vigilancia por los diferentes almacenes de la citada empresa, comprobando si las puertas están cerradas, si hay humo, en cuyo caso avisarían a los bomberos, y comprobar si alguna puerta o ventana ha sido forzada en cuyo caso llamarían a la Guardia Civil. Además, aseguraron que el tiempo en comprobar cada nave-almacén es de unos 15 o 20 minutos.
Tras esta investigación, en 2008, se le impone una sanción por infracción de la Ley de Seguridad, que fue recurrida alegando que las funciones eran de custodia. El recurso ha sido desestimado.
El cuerpo del joven José Álvarez Nión, de 22 años, que trabajaba como vigilante para la empresa sancionada en el polígono de O Rebullón, aparecía con varios disparos. Era el 15 de agosto de 2007. Los autores del crimen, dos delincuentes, fueron detenidos poco después y juzgados en 2009. Reconocieron haber matado al joven de dos disparos. Aquella noche se habían desplazado hasta el polígono a fumar unos porros, dijeron.
La mala suerte quiso que el joven se topara con ellos y acabó falleciendo. Un jurado popular les encontró culpables y fueron condenados a 15 años de prisión.
Resuelto el crimen, y cuatro años después de que ocurriera, la empresa para la que trabajaba acaba de recibir una sentencia que rechaza el recurso interpuesto contra la sanción establecida en 2008 tras la investigación interna abierta .
Según consta en el fallo de la sala de lo Contencioso, este proceso se inicia a raíz del crimen del vigilante que trabajaba para dicha empresa. Tras los sucesos, acontecidos en 2007, se abrió una investigación interna para aclarar si la empresa estaba prestando servicios de vigilancia sin estar autorizada para ello.
Tras tomar declaración al responsable de la empresa ser ordena también el interrogatorio a los compañeros del fallecido quienes manifiestan que su trabajo consiste en recoger un vehículo de la empresa para la que se ofrecía el servicio en la nave de Mos y con él realizar rondas de vigilancia por los diferentes almacenes de la citada empresa, comprobando si las puertas están cerradas, si hay humo, en cuyo caso avisarían a los bomberos, y comprobar si alguna puerta o ventana ha sido forzada en cuyo caso llamarían a la Guardia Civil. Además, aseguraron que el tiempo en comprobar cada nave-almacén es de unos 15 o 20 minutos.
Tras esta investigación, en 2008, se le impone una sanción por infracción de la Ley de Seguridad, que fue recurrida alegando que las funciones eran de custodia. El recurso ha sido desestimado.
El cuerpo del joven José Álvarez Nión, de 22 años, que trabajaba como vigilante para la empresa sancionada en el polígono de O Rebullón, aparecía con varios disparos. Era el 15 de agosto de 2007. Los autores del crimen, dos delincuentes, fueron detenidos poco después y juzgados en 2009. Reconocieron haber matado al joven de dos disparos. Aquella noche se habían desplazado hasta el polígono a fumar unos porros, dijeron.
La mala suerte quiso que el joven se topara con ellos y acabó falleciendo. Un jurado popular les encontró culpables y fueron condenados a 15 años de prisión.
Resuelto el crimen, y cuatro años después de que ocurriera, la empresa para la que trabajaba acaba de recibir una sentencia que rechaza el recurso interpuesto contra la sanción establecida en 2008 tras la investigación interna abierta .
Los armadores logran que Defensa apoye las armas pesadas en los atuneros
El aumento del número de ataques de piratas que operan en las aguas del Cuerno de África y el mayor nivel de violencia utilizado en sus asaltos preocupan seriamente a los armadores de la flota atunera española que faena en el océano Índico. De ahí que las dos principales patronales del sector, Opagac y Anabac, lleven meses insistiendo al Ministerio de Defensa que permita el embarque de ametralladoras pesadas en los pesqueros.
Ayer, la ministra Carme Chacón logró dar un paso en esta dirección. En viaje oficial por el este de África, Chacón se reunió ayer con el presidente de Seychelles, James Alix Michel, y consiguió el compromiso de crear una comisión bilateral para estudiar el asunto de las armas de gran calibre.
A finales de 2009, cuando el Gobierno dio luz verde al embarque de seguridad privada para proteger a los atuneros de los ataques piratas, se abrió la posibilidad de que los vigilantes pudieran llevar armamento militar. Así, el Ejecutivo dio el visto bueno a que pudieran utilizar ametralladoras pesadas Browning M2 calibre .50. Sin embargo, el Gobierno de Seychelles se negó a autorizar este tipo de armas. Puerto Victoria, la capital del archipiélago, es la ciudad de referencia de la mayor parte de los atuneros de pabellón español que faenan en la zona.
En la actualidad, los vigilantes de la empresa Segur Ibérica que trabajan en los 17 barcos vascos y gallegos que pescan en el Índico están armados con fusiles de asalto G36 y ametralladoras medias MG3. También disponen de pistolas, chalecos antibalas y gafas de visión nocturnas.
El gesto del Gobierno de Seychelles no le va a salir gratis a España. La ministra ha tenido que ofrecer cursos de formación para militares y policías del país en tareas de búsqueda y salvamento marítimo por parte de la Fuerza Aérea.
Cursos de abordaje
Asimismo, infantes de marina de la Armada española que forman parte de la operación internacional Atalanta instruirán a la guardia costera del archipiélago en técnicas de abordaje e inspección de buques, informó ayer el Ministerio de Defensa.
Además, España va a instalar una unidad permanente de telemedicina dentro de la red hospitalaria de las Seychelles que estará en contacto con el hospital militar Gómez Ulla y que también servirá para atender a los pescadores y vigilantes españoles.
El uso de seguridad privada está evitando nuevos secuestros entre los atuneros españoles. No obstante, su despliegue (suelen trabajar cuatro vigilantes en cada buque) está teniendo un serio impacto económico. Los armadores deben costear la mitad del servicio. El otro 50% se lo reparten el Estado y las comunidades autónomas. El coste estimado de la seguridad para los atuneros vascos, que son mayoría con 12 barcos, asciende en esta campaña a los 5,97 millones de euros.
Ayer, la ministra Carme Chacón logró dar un paso en esta dirección. En viaje oficial por el este de África, Chacón se reunió ayer con el presidente de Seychelles, James Alix Michel, y consiguió el compromiso de crear una comisión bilateral para estudiar el asunto de las armas de gran calibre.
A finales de 2009, cuando el Gobierno dio luz verde al embarque de seguridad privada para proteger a los atuneros de los ataques piratas, se abrió la posibilidad de que los vigilantes pudieran llevar armamento militar. Así, el Ejecutivo dio el visto bueno a que pudieran utilizar ametralladoras pesadas Browning M2 calibre .50. Sin embargo, el Gobierno de Seychelles se negó a autorizar este tipo de armas. Puerto Victoria, la capital del archipiélago, es la ciudad de referencia de la mayor parte de los atuneros de pabellón español que faenan en la zona.
En la actualidad, los vigilantes de la empresa Segur Ibérica que trabajan en los 17 barcos vascos y gallegos que pescan en el Índico están armados con fusiles de asalto G36 y ametralladoras medias MG3. También disponen de pistolas, chalecos antibalas y gafas de visión nocturnas.
El gesto del Gobierno de Seychelles no le va a salir gratis a España. La ministra ha tenido que ofrecer cursos de formación para militares y policías del país en tareas de búsqueda y salvamento marítimo por parte de la Fuerza Aérea.
Cursos de abordaje
Asimismo, infantes de marina de la Armada española que forman parte de la operación internacional Atalanta instruirán a la guardia costera del archipiélago en técnicas de abordaje e inspección de buques, informó ayer el Ministerio de Defensa.
Además, España va a instalar una unidad permanente de telemedicina dentro de la red hospitalaria de las Seychelles que estará en contacto con el hospital militar Gómez Ulla y que también servirá para atender a los pescadores y vigilantes españoles.
El uso de seguridad privada está evitando nuevos secuestros entre los atuneros españoles. No obstante, su despliegue (suelen trabajar cuatro vigilantes en cada buque) está teniendo un serio impacto económico. Los armadores deben costear la mitad del servicio. El otro 50% se lo reparten el Estado y las comunidades autónomas. El coste estimado de la seguridad para los atuneros vascos, que son mayoría con 12 barcos, asciende en esta campaña a los 5,97 millones de euros.
CCOO denuncia la situación que atraviesan los 60 empleados de Cosegur Balear, que arrastra una deuda de 1,5 millones
La Federación de Actividades Diversas de CCOO en Baleares ha denunciado la "gravísima situación" que atraviesan los empleados de la empresa de seguridad privada Cosegur Balear -unos 60 trabajadores-, debido al "presumible" estado de insolvencia de la compañía, que arrastra una deuda de alrededor de 1,5 millones de euros con la Agencia Tributaria.
En un comunicado, el sindicato ha lamentado que por el momento a los trabajadores se les ha comunicado que no van a cobrar sus salarios correspondientes al mes de junio, aunque posiblemente a mediados de mes se les realice un ingreso en sus cuentas de unos 500 euros.
En este contexto, la entidad sindical ha advertido de que no está "dispuesta a permitir que los trabajadores se conviertan nuevamente en el chivo expiatorio de la mala gestión y de las irregularidades empresariales", por lo que en tal sentido y entre otras medidas, se está elaborando un calendario de movilizaciones que comenzarán el próximo 20 de julio, a las 11.00 horas, ante la sede de la Dirección Provincial del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS).
Tal y como apuntan desde CCOO, la información que la empresa ha trasladado a los propios trabajadores apunta a que ésta podría haber presentado un concurso de acreedores en el Juzgado de lo Mercantil. Cosegur es adjudicataria de numerosos servicios de seguridad entre los que se encuentran numerosos organismos públicos, concretamente catorce Consellerias, la Dirección Provincial del INSS y la Universitat de les Illes Balears (UIB).
"Lo que resulta realmente incomprensible es por qué a una empresa que arrastra tal déficit con la Agencia Tributaria se le ha permitido concurrir a concursos públicos y se le han adjudicado servicios, toda vez que se supone que las empresas concurrentes han de acreditar solvencia", asevera la entidad sindical, que señala como el ejemplo más reciente la adjudicación del servicio de seguridad de la Conselleria de Agricultura a mediados del pasado mes de mayo.
Tal y como recalca, funcionarios de la propia Conselleria han manifestado que, en su momento, Cosegur aportó documentación acreditativa de su solvencia, si bien desde el sindicato han solicitado por escrito copia de esta documentación dado que "no acertamos a comprender cómo es posible que Cosegur, en el mes de mayo de 2011, sea solvente cuando obra en nuestro poder una declaración de embargo de la Agencia Tributaria" remitida al Fogaiba el pasado 4 de marzo de 2011.
"Tampoco entendemos cómo la Conselleria de Agricultura, una vez tiene conocimiento de la situación económica real de la empresa y nos consta que así es, no inicia de oficio las actuaciones tendentes a rescindir su contrato con Cosegur Balear", añaden desde CCOO.
En un comunicado, el sindicato ha lamentado que por el momento a los trabajadores se les ha comunicado que no van a cobrar sus salarios correspondientes al mes de junio, aunque posiblemente a mediados de mes se les realice un ingreso en sus cuentas de unos 500 euros.
En este contexto, la entidad sindical ha advertido de que no está "dispuesta a permitir que los trabajadores se conviertan nuevamente en el chivo expiatorio de la mala gestión y de las irregularidades empresariales", por lo que en tal sentido y entre otras medidas, se está elaborando un calendario de movilizaciones que comenzarán el próximo 20 de julio, a las 11.00 horas, ante la sede de la Dirección Provincial del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS).
Tal y como apuntan desde CCOO, la información que la empresa ha trasladado a los propios trabajadores apunta a que ésta podría haber presentado un concurso de acreedores en el Juzgado de lo Mercantil. Cosegur es adjudicataria de numerosos servicios de seguridad entre los que se encuentran numerosos organismos públicos, concretamente catorce Consellerias, la Dirección Provincial del INSS y la Universitat de les Illes Balears (UIB).
"Lo que resulta realmente incomprensible es por qué a una empresa que arrastra tal déficit con la Agencia Tributaria se le ha permitido concurrir a concursos públicos y se le han adjudicado servicios, toda vez que se supone que las empresas concurrentes han de acreditar solvencia", asevera la entidad sindical, que señala como el ejemplo más reciente la adjudicación del servicio de seguridad de la Conselleria de Agricultura a mediados del pasado mes de mayo.
Tal y como recalca, funcionarios de la propia Conselleria han manifestado que, en su momento, Cosegur aportó documentación acreditativa de su solvencia, si bien desde el sindicato han solicitado por escrito copia de esta documentación dado que "no acertamos a comprender cómo es posible que Cosegur, en el mes de mayo de 2011, sea solvente cuando obra en nuestro poder una declaración de embargo de la Agencia Tributaria" remitida al Fogaiba el pasado 4 de marzo de 2011.
"Tampoco entendemos cómo la Conselleria de Agricultura, una vez tiene conocimiento de la situación económica real de la empresa y nos consta que así es, no inicia de oficio las actuaciones tendentes a rescindir su contrato con Cosegur Balear", añaden desde CCOO.
Los sindicatos de seguridad privada desean trasladar su inquietud ante Ares y Camacho
Los sindicatos representados en el sector de la seguridad privada han solicitado una reunión urgente con el consejero vasco de Interior, Rodolfo Ares, y el secretario de Estado de la Seguridad, Antonio Camacho, para tratar la retirada de escoltas privados a personas amenazadas en Euskadi y Navarra.
Fuentes sindicales informaron ayer de que los sindicatos con representación en el sector (CC OO, ELA, UGT y CSI-F) han reclamado sendas reuniones con Ares y Camacho "a la mayor brevedad posible" dada "la inquietud generada dentro del colectivo" por el ajuste anunciado en el servicio de protección a personas amenazadas por el terrorismo.
Según explicaron, la "preocupación" en el colectivo está motivada por "el plan puesto en marcha por la Administración para la retirada en dos fases de los escoltas privados que prestan su servicio de protección personal" a ciudadanos amenazados del País Vasco y Navarra. Los sindicatos citados consideran que estos planes afectarían laboralmente "de forma muy grave" al colectivo de escoltas privados, que, según han evidenciado las mismas fuentes, "han venido desarrollando su actividad desde hace más de 15 años con un resultado altamente satisfactorio e incuestionable".
El sindicato CC OO considera que la situación "puede tener un efecto de reconversión en este sector de profesionales. Según fuentes de dicha central, alguna empresa de seguridad "ya tiene previsto presentar un ERE -Expediente de Regulación de Empleo-" para sus trabajadores.
Por su parte, el consejero vasco del Interior, Rodolfo Ares, advirtió también ayer de que "no hace falta que el PP nos diga que estemos vigilantes" porque el Gobierno vasco va a mantener la política de "tolerancia cero con Bildu" y va a exigir "que se cumplan las leyes".
En una entrevista en la Sexta2, se refirió, de esta forma, a la iniciativa del PP en el Congreso para que se "extreme" la vigilancia a Bildu. Ares ha dicho que "no hace falta que el PP nos diga que estemos vigilantes" porque, dijo, "vamos a mantener la política de vigilancia y tolerancia cero y vamos a exigir que se cumplan las leyes". Finalmente, el consejero aseguró que no tiene "voluntad ni ofertas" de irse a Madrid y su decisión es dedicarse a la política en Euskadi".
Fuentes sindicales informaron ayer de que los sindicatos con representación en el sector (CC OO, ELA, UGT y CSI-F) han reclamado sendas reuniones con Ares y Camacho "a la mayor brevedad posible" dada "la inquietud generada dentro del colectivo" por el ajuste anunciado en el servicio de protección a personas amenazadas por el terrorismo.
Según explicaron, la "preocupación" en el colectivo está motivada por "el plan puesto en marcha por la Administración para la retirada en dos fases de los escoltas privados que prestan su servicio de protección personal" a ciudadanos amenazados del País Vasco y Navarra. Los sindicatos citados consideran que estos planes afectarían laboralmente "de forma muy grave" al colectivo de escoltas privados, que, según han evidenciado las mismas fuentes, "han venido desarrollando su actividad desde hace más de 15 años con un resultado altamente satisfactorio e incuestionable".
El sindicato CC OO considera que la situación "puede tener un efecto de reconversión en este sector de profesionales. Según fuentes de dicha central, alguna empresa de seguridad "ya tiene previsto presentar un ERE -Expediente de Regulación de Empleo-" para sus trabajadores.
Por su parte, el consejero vasco del Interior, Rodolfo Ares, advirtió también ayer de que "no hace falta que el PP nos diga que estemos vigilantes" porque el Gobierno vasco va a mantener la política de "tolerancia cero con Bildu" y va a exigir "que se cumplan las leyes".
En una entrevista en la Sexta2, se refirió, de esta forma, a la iniciativa del PP en el Congreso para que se "extreme" la vigilancia a Bildu. Ares ha dicho que "no hace falta que el PP nos diga que estemos vigilantes" porque, dijo, "vamos a mantener la política de vigilancia y tolerancia cero y vamos a exigir que se cumplan las leyes". Finalmente, el consejero aseguró que no tiene "voluntad ni ofertas" de irse a Madrid y su decisión es dedicarse a la política en Euskadi".
Las centrales nucleares piden armas de guerra para sus vigilantes
Los propietarios de las centrales atómicas y el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) quieren
que sus vigilantes de seguridad privada porten armamento de guerra, como ya ocurre en
los atuneros españoles que faenan en aguas tomadas por piratas somalíes. Según ha podido
saberPúblico, los responsables de los ocho reactores atómicos se reunieron el jueves en el
Ministerio del Interior con representantes del CSN, jefes de la Guardia Civil de las provincias
con centrales, Mossos d'Esquadra, Policía Nacional y abogados del Estado para dar forma a la
propuesta, que ya estudia la Secretaría de Estado de Seguridad, dirigida por Antonio
Camacho, número dos de Alfredo Pérez Rubalcaba.
que sus vigilantes de seguridad privada porten armamento de guerra, como ya ocurre en
los atuneros españoles que faenan en aguas tomadas por piratas somalíes. Según ha podido
saberPúblico, los responsables de los ocho reactores atómicos se reunieron el jueves en el
Ministerio del Interior con representantes del CSN, jefes de la Guardia Civil de las provincias
con centrales, Mossos d'Esquadra, Policía Nacional y abogados del Estado para dar forma a la
propuesta, que ya estudia la Secretaría de Estado de Seguridad, dirigida por Antonio
Camacho, número dos de Alfredo Pérez Rubalcaba.
Las empresas de seguridad piden el reconocimiento de los vigilantes privados como "agentes de la autoridad"
Que los vigilantes privados estén reconocidos como "agentes de la autoridad" es un de los retos planteados por las empresas de seguridad en la celebración de la I Jornada Técnica de Seguridad celebrada en la Federación Regional de Empresarios del Metal de Murcia (FREMM), entidad que organizó el encuentro junto a la Asociación de Empresas de Seguridad de la Región de Murcia (ARESMUR).
La propuesta se planteó ante un público formado por empresas de seguridad procedentes de diferentes puntos de la Región, coincidente en avanzar hacia la mejora de la protección del personal de seguridad privada como colaborador de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad en casos, circunstancias y servicios específicos, según se expuso durante la jornada que fue inaugurada por Carlos Llorente, jefe superior de Policía, mientras la clausura estuvo a cargo de Encarna Ortiz, presidenta de Aresmur, además de contarse entre los asistentes con Ginés Martínez, director del Servicio Regional de Empleo y Formación.
No es la primera vez que en foros análogos al celebrado en FREMM se hace esta petición, que llega en un momento de buena sintonía entre la seguridad pública y privada, como fue el II Congreso Nacional de Seguridad Privada, celebrado recientemente bajo el lema "avanzamos juntos".
Desde las empresas de seguridad se está demandando retos como la revisión y mejora del modelo de seguridad privada, la potenciación de los departamentos de seguridad de las empresas, la creación de una titulación oficial en esta materia, la continuidad en la potenciación de la colaboración con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y el aumento de la protección jurídica de los profesionales del sector, entre otros desafíos expuestos por Luis González, secretario general de la Federación Empresarial Española de Seguridad.
La acción más inmediatas dentro del sector es la adaptación de las empresas a partir del 18 de agosto a las órdenes aprobadas por el Ministerio de Interior sobre regulación de la seguridad privada en ámbitos como los sistemas de alarmas, comisiones mixtas, además de medidas de seguridad privada y personal, sobre las que se trataron en el evento en donde se expuso que esta mayor regulación conllevará una disminución de las falsas alarmas y de los trámites administrativos. Para ello, se contó con la presencia de Francisco Jiménez, comisario jefe de la Brigada Operativa de Personal de la Unidad Central de Seguridad Privada.
Por otra parte, las empresas se encuentran inmersas en su adecuación a las normas UNE o UNE-EN, por las que se está regulando los requisitos a cumplir por los sistemas de seguridad, de cara a un mayor control sobre el intrusismo, mayor calidad del servicio y evitar la incertidumbre.
La propuesta se planteó ante un público formado por empresas de seguridad procedentes de diferentes puntos de la Región, coincidente en avanzar hacia la mejora de la protección del personal de seguridad privada como colaborador de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad en casos, circunstancias y servicios específicos, según se expuso durante la jornada que fue inaugurada por Carlos Llorente, jefe superior de Policía, mientras la clausura estuvo a cargo de Encarna Ortiz, presidenta de Aresmur, además de contarse entre los asistentes con Ginés Martínez, director del Servicio Regional de Empleo y Formación.
No es la primera vez que en foros análogos al celebrado en FREMM se hace esta petición, que llega en un momento de buena sintonía entre la seguridad pública y privada, como fue el II Congreso Nacional de Seguridad Privada, celebrado recientemente bajo el lema "avanzamos juntos".
Desde las empresas de seguridad se está demandando retos como la revisión y mejora del modelo de seguridad privada, la potenciación de los departamentos de seguridad de las empresas, la creación de una titulación oficial en esta materia, la continuidad en la potenciación de la colaboración con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y el aumento de la protección jurídica de los profesionales del sector, entre otros desafíos expuestos por Luis González, secretario general de la Federación Empresarial Española de Seguridad.
La acción más inmediatas dentro del sector es la adaptación de las empresas a partir del 18 de agosto a las órdenes aprobadas por el Ministerio de Interior sobre regulación de la seguridad privada en ámbitos como los sistemas de alarmas, comisiones mixtas, además de medidas de seguridad privada y personal, sobre las que se trataron en el evento en donde se expuso que esta mayor regulación conllevará una disminución de las falsas alarmas y de los trámites administrativos. Para ello, se contó con la presencia de Francisco Jiménez, comisario jefe de la Brigada Operativa de Personal de la Unidad Central de Seguridad Privada.
Por otra parte, las empresas se encuentran inmersas en su adecuación a las normas UNE o UNE-EN, por las que se está regulando los requisitos a cumplir por los sistemas de seguridad, de cara a un mayor control sobre el intrusismo, mayor calidad del servicio y evitar la incertidumbre.
El Delegado del Gobierno en Andalucia destaca la labor de los profesionales de la seguridad privada y su colaboración con las FCSE
El delegado del Gobierno en Andalucía, Luis García Garrido, ha reconocido la importante labor que a diario desarrollan los más de 11.000 profesionales que integran el sector de la seguridad privada en Andalucía, así como la permanente colaboración de éstos con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (FCSE).
Durante la clausura de unas jornadas celebradas en Sevilla, en la sede de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), con motivo del Día de Seguridad Privada, García Garrido ha destacado la necesaria actualización de los profesionales de la seguridad privada y la cualificación con la que deben contar, en cumplimiento de los requisitos recogidos en el marco normativo del sector, que ha sido objeto de análisis en estas jornadas.
A juicio del delegado del Gobierno en Andalucía, este sector requiere una constante actualización y una formación cada vez más cualificada de sus miembros, como ingrediente básico para que se ofrezcan unos servicios de mayor calidad.
García Garrido ha abogado por seguir profundizando en la cooperación y la coordinación en materia de seguridad, tanto entre las propias Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, como entre éstas y el sector de la seguridad privada. Según García Garrido, la seguridad es una prioridad para el Gobierno, y así lo demuestran —ha apuntado— los esfuerzos realizados en los últimos años y, como consecuencia de ello, los buenos resultados obtenidos con la reducción de la criminalidad en España y Andalucía.
El delegado del Gobierno ha aludido a la importancia de la seguridad como marco general para el desarrollo de la vida de la ciudadanía en libertad y en una sociedad democrática, y ha recordado el importante papel que la Administración General del Estado tiene como garante de las libertades, tanto individuales como colectivas, a través de las FCSE.
A la clausura de las jornadas sobre seguridad privada han asistido el jefe superior de Policía de Andalucía Occidental, Antonio Jesús Figal Fuentes; y el general jefe de la IV Zona de la Guardia Civil, Laurentino Ceña Coro; así como el secretario general de la CEA, Antonio Carrillo, y representantes de la Asociación Profesional de Compañías Privadas de Servicios de Seguridad (Aproser), de la Asociación Provincial de Empresas de Seguridad de Sevilla (Apess), de la Asociación Estatal de Formación de Seguridad Privada (Asefosp) y de la Unidad Territorial de Seguridad Privada de Sevilla.
Durante la clausura de unas jornadas celebradas en Sevilla, en la sede de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), con motivo del Día de Seguridad Privada, García Garrido ha destacado la necesaria actualización de los profesionales de la seguridad privada y la cualificación con la que deben contar, en cumplimiento de los requisitos recogidos en el marco normativo del sector, que ha sido objeto de análisis en estas jornadas.
A juicio del delegado del Gobierno en Andalucía, este sector requiere una constante actualización y una formación cada vez más cualificada de sus miembros, como ingrediente básico para que se ofrezcan unos servicios de mayor calidad.
García Garrido ha abogado por seguir profundizando en la cooperación y la coordinación en materia de seguridad, tanto entre las propias Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, como entre éstas y el sector de la seguridad privada. Según García Garrido, la seguridad es una prioridad para el Gobierno, y así lo demuestran —ha apuntado— los esfuerzos realizados en los últimos años y, como consecuencia de ello, los buenos resultados obtenidos con la reducción de la criminalidad en España y Andalucía.
El delegado del Gobierno ha aludido a la importancia de la seguridad como marco general para el desarrollo de la vida de la ciudadanía en libertad y en una sociedad democrática, y ha recordado el importante papel que la Administración General del Estado tiene como garante de las libertades, tanto individuales como colectivas, a través de las FCSE.
A la clausura de las jornadas sobre seguridad privada han asistido el jefe superior de Policía de Andalucía Occidental, Antonio Jesús Figal Fuentes; y el general jefe de la IV Zona de la Guardia Civil, Laurentino Ceña Coro; así como el secretario general de la CEA, Antonio Carrillo, y representantes de la Asociación Profesional de Compañías Privadas de Servicios de Seguridad (Aproser), de la Asociación Provincial de Empresas de Seguridad de Sevilla (Apess), de la Asociación Estatal de Formación de Seguridad Privada (Asefosp) y de la Unidad Territorial de Seguridad Privada de Sevilla.
Interior encargará la seguridad de las comisarías a vigilantes privados
Lo que se venía barruntando desde hace meses será finalmente una realidad y el departamento de Interior sustituirá a los er-tzainas que ejercen actualmente las tareas de control y vigilancia de las comisarías por agentes de seguridad privada. Así lo denunció ayer el sindicato ESAN, que situó la implantación de esta medida el próximo 1 de agosto y definió la situación generada como "grave", ya que supone, a su juicio, un "ataque a los intereses laborales de los ertzainas, además de un rebaje de la calidad del servicio que se ofrece a los ciudadanos".
Fuentes de la central abertzale afirmaron a este diario que esta iniciativa ha podido verse acelerada por la decisión de retirar escoltas privados a dirigentes políticos tras los comicios del 22-M. Así, muchos de estos guardaespaldas pasarían a trabajar en las comisarías de la Ertzaintza.
"Hay que reconocerles un mérito, no les podemos dejar en la estacada", habrían afirmado dirigentes de la Consejería de Interior, según las mismas fuentes. La reducción de la protección a cargos y excargos políticos, muy criticada en los últimos meses, ha sido justificada desde Interior por la actual tregua de ETA y la crisis económica.
En un comunicado, agregó que se va a realizar un estudio para habilitar en las ertzain etxeas de armeros específicos para que los agentes de empresas privadas depositen sus armas cuando no están en horario de trabajo. Así se lo habría transmitido el jefe de División de Seguridad Ciudadana en un escrito a los jefes territoriales, y éstos a su vez a los distintos jefes de unidad. Todo ello para que personal privado realice funciones de seguridad y atención al ciudadano.
Un portavoz de ESAN agregó que la contratación de agentes privados puede afectar a más de 200 puestos, teniendo en cuenta que hay 26 comisarías y que existen tres turnos de trabajo. Dicha cifra puede aumentar a entre 250 y 300 si esta medida se aplica a otros lugares donde la Ertzaintza realiza labores de vigilancia, como los juzgados.
Actualmente, esta situación se da en la macrocomisaría de Erandio, en la Academia de Arkaute, en la sede del Gobierno Vasco en Lakua y en comisarías como Oiartzun y juzgados como el de Vitoria, donde ya se sustituyó a los ertzainas por vigilantes contratados a empresas.
Fuentes de la central abertzale afirmaron a este diario que esta iniciativa ha podido verse acelerada por la decisión de retirar escoltas privados a dirigentes políticos tras los comicios del 22-M. Así, muchos de estos guardaespaldas pasarían a trabajar en las comisarías de la Ertzaintza.
"Hay que reconocerles un mérito, no les podemos dejar en la estacada", habrían afirmado dirigentes de la Consejería de Interior, según las mismas fuentes. La reducción de la protección a cargos y excargos políticos, muy criticada en los últimos meses, ha sido justificada desde Interior por la actual tregua de ETA y la crisis económica.
En un comunicado, agregó que se va a realizar un estudio para habilitar en las ertzain etxeas de armeros específicos para que los agentes de empresas privadas depositen sus armas cuando no están en horario de trabajo. Así se lo habría transmitido el jefe de División de Seguridad Ciudadana en un escrito a los jefes territoriales, y éstos a su vez a los distintos jefes de unidad. Todo ello para que personal privado realice funciones de seguridad y atención al ciudadano.
Un portavoz de ESAN agregó que la contratación de agentes privados puede afectar a más de 200 puestos, teniendo en cuenta que hay 26 comisarías y que existen tres turnos de trabajo. Dicha cifra puede aumentar a entre 250 y 300 si esta medida se aplica a otros lugares donde la Ertzaintza realiza labores de vigilancia, como los juzgados.
Actualmente, esta situación se da en la macrocomisaría de Erandio, en la Academia de Arkaute, en la sede del Gobierno Vasco en Lakua y en comisarías como Oiartzun y juzgados como el de Vitoria, donde ya se sustituyó a los ertzainas por vigilantes contratados a empresas.
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