Los trabajadores y trabajadoras despedidos el pasado 5 de noviembre por la empresa de seguridad Mevisa protagonizaron el pasado sábado una manifestación de 12 horas de duración ininterrumpida que discurrió por diversos puntos de la Urbanización Son Vida en Mallorca.
Con un itinerario programado que partía de las inmediaciones del Hotel Son Vida, los manifestantes demostraron nuevamente que no están dispuestos a claudicar ni a que Mevisa pisotee sus derechos.
Por su parte, Mevisa comienza a mostrar síntomas de preocupación ante estas movilizaciones que, según ha reconocido, les están empezando a pasar factura.
En una circular emitida el pasado viernes y distribuida entre los trabajadores de los diferentes servicios, la nueva dirección de la empresa manifiesta su desacuerdo con este tipo de iniciativas a las que califica de irresponsables, desacertadas y que desprestigian la imagen de la empresa.
Desde CCOO de Construcción y Servicios de Illes Balears consideran que "lo que realmente desprestigia la imagen de una empresa es que se despida de forma arbitraria a 22 trabajadores con hipotecas, cargas familiares o en grave riesgo de exclusión laboral, sin un solo euro de indemnización, al amparo de una pretendida situación de insolvencia que parece no existir cuando se trata de renovar íntegramente su flota de vehículos o contratar los servicios de una de las gestorías y uno de los bufetes de abogados más caros de Baleares".
Por su parte Mevisa ha anunciado que, si estas movilizaciones se siguen produciendo, la empresa se verá en la obligación de tener que realizar nuevos reajustes de plantilla, amenaza a la que CCOO de Construcción y Servicios de Illes Balears ha contestado "tenemos claro que va a suceder, y lo llevamos anunciando desde hace tiempo; pero que no a causa de las movilizaciones, sino como parte del nuevo plan de viabilidad de la empresa para subsistir en un mercado".
"Es ahí donde tiene verdaderos problemas, han señalado, ya que ha de competir con empresas como TRABLISA, donde hace escasos días saltaba el escándalo de que en 2014 se habían realizado 1.800.000 horas extras, volumen suficiente para dar trabajo a 1000 personas".
"Para competir en estas condiciones, han denunciado desde CCOO de Construcción y Servicios de Illes Balears, Mevisa ha de montarse en el mismo carro: realizar despidos masivos, dejar su plantilla bajo mínimos y que el mismo volumen de trabajo se cubra mediante la realización de ingentes cantidades de horas extraordinarias, más baratas y que cotizan al tipo reducido del 14 %, con lo que Mevisa se ahorraría, además, el coste de muchas contrataciones, salarios, cotizaciones a Seguridad Social y Tributación a Hacienda".
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