Ya está cerrado el dispositivo de seguridad que vigilará Madrid la noche del 24 de mayo, cuando Atlético y Real Madrid se juegan la final de la Champions en Lisboa. Unos 900 policías (600 agentes del Cuerpo Nacional de Policía y 300 municipales) y 130 miembros del SAMUR vigilarán la capital de España mientras sus dos equipos más célebres se disputan la Liga de Campeones en el país vecino.
Según se ha acordado en las reuniones mantenidas entre la Delegación del Gobierno, con la participación de los dos equipos, la Jefatura Superior de Policía, la Guardia Civil y el Ayuntamiento de la capital, se han puesto en marcha dos dispositivos alternativos, según el equipo que gane. Si el Real Madrid consigue levantar la décima copa, cuando el equipo aterrice en Barajas sobre las dos de la madrugada del día 25, se trasladarán en autobús descubierto hasta el estadio Santiago Bernabéu, y de allí irán a Cibeles. Si, por el contrario, es el Atlético de Madrid el equipo que se estrenaría como campeón de la Champions, el conjunto rojiblanco no participará en ninguna celebración, aunque se cuenta con que los aficionados lo hagan de manera espontánea en Neptuno. Los festejos, si se cumple este pronóstico, tendrían lugar el día 25 por la tarde, con un recorrido cuya definición y horarios deberán ser aprobados por la Junta Electoral.
La Gane quien gane, la tarde-noche del 24 de mayo habrá miembros de la Unidad de Intervención Policial, de la Unidad de Prevención y Reacción, de Seguridad Ciudadana, de Unidad de Caballería, motocicletas y guías caninos entre los 600 agentes que pondrá a disposición de Madrid la Policía Nacional. En cuanto a los actos a celebrar en los estadios, participarán hasta 900 vigilantes jurados y auxiliares en el Bernabéu y 300 en el Vicente Calderón. La Guardia Civil también intensificará la vigilancia en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas para evitar incidentes a la llegada de los equipos la misma madrugada que se dispute el partido.
Los respectivos equipos irán escoltados hasta Lisboa por cinco agentes del Cuerpo Nacional de Policía para coordinar la seguridad con la policía portuguesa. También se han incrementado los efectivos de la Brigada Móvil que opera en los trenes que harán el recorrido de ida y vuelta a Lisboa. Por otra parte, los clubs ya tienen organizado cómo ver el partido dentro de sus estadios.
Renfe también ha planificado cómo serán los viajes que se harán en ferrocarril el sábado 24 y, con el visto bueno de las fuerzas de seguridad del Estado, ha optado por separar a los hinchas que se trasladarán en tren de Madrid a Portugal. Los seguidores del Real Madrid saldrán desde la estación Norte de Chamartín y llegarán a Lisboa/Apolonia, mientras que los del Atlético de Madrid viajarán desde Atocha hasta Lisboa/Oriente.
No se podrá beber alcohol
En los mismos trenes que Renfe ha habilitado para que los aficionados puedan ver el partido en la ciudad donde se celebra no estará autorizado el consumo de bebidas alcohólicas. Atención a todos aquellos que estén pensando en desafiar las reglas: habrá policías vestidos de paisano viajando con los aficionados para evitar que se produzca ningún problema.
Los cuerpos de seguridad no dudan de la buena intención de las aficiones y confían en que las celebraciones en Madrid y en Lisboa no terminen en altercados. Sin embargo, son conscientes de que tanto los Ultrasur como los ultras del Atlético tienen entre sus filas “minorías muy peligrosas” que podrían dinamizar la buena sintonía de los aficionados tras el derbi. Una pelea en la Puerta del Sol, si la Comunidad de Madrid hubiera puesto finalmente una pantalla gigante en la Real Casa de Correos para seguir el partido, podría conllevar graves problemas. La celebración, por cierto, coincide con la jornada de reflexión de las elecciones europeas.
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