La Ertzaintza gasta 2,83 millones en seguridad privada para sus centros.

La Ertzaintza gasta cerca de tres millones de euros al año en seguridad privada para custodiar sus macrocomisarías de Erandio y Oiartzun, la sede del Departamento en Bilbo y la Academia de Arkaute. Unos 65 vigilantes privados asumen esas tareas, cuando la plantilla de la Ertzaintza ronda los 8.000 agentes. En total, el Gobierno de Lakua tiene un gasto de 18 millones de euros en seguridad privada.

Vigilantes privados custodian la seguridad de los principales centros de la Ertzaintza. Una práctica que se repite desde hace años y que tiene un enorme coste de dinero público. En 2013 el Departamento de Estefanía Beltrán de Heredia gastó 2,83 millones de euros en la vigilancia de las macrocomisarías de Erandio y Oiartzun, de la sede de Bilbo y de la Academia de Policía de Arkaute.

Estas tareas se encomiendan a diversas empresas de seguridad, (Garda, Sabico, Prosegur, Castellana...) que se van subrogando una plantilla de vigilantes que ronda los 65 empleados.

Cabe recordar que la Ertzaintza dispone de cerca de 8.000 efectivos, con un presupuesto para el cuerpo de 576,5 millones de euros.

Funciones

Entre las funciones encomendadas a los vigilantes privados en los centros policiales está la de proteger los locales y a las personas que se encuentran en los mismos, es decir, principalmente a los ertzainas que hay en el interior.

Deben evitar «la comisión de actos delictivos» y, en el caso de capturar a algún delincuente, «ponerlo inmediatamente a disposición de la Ertzaintza», con la advertencia añadida de que «no pueden proceder a su interrogatorio».

Los guardas de seguridad se encargan además de los controles de identidad en el acceso a estos centros policiales y de permanecer atentos a las pantallas de las cámaras de vigilancia.

El contrato de vigilancia más caro es el del centro de Erandio, en el que trabajan una treintena de vigilantes, con un jefe de servicio y cuatro jefes de equipo. El coste total asciende a 1,47 millones de euros.

La plantilla de vigilantes de Oiartzun es de 14 personas, de las que dos tienen un contrato indefinido mientas que el resto, incluido el jefe de equipo, es «por obra y servicio». También hay un eventual al 22,5% de jornada. El coste total suma esta vez 530.436,16 euros.

En la Academia de Arkaute, donde se forman tanto ertzainas como policías municipales, el coste de la seguridad privada es de 740.337,77 euros, con una veintena de vigilantes armados.

Juzgados y centros de menores

El gasto total del Gobierno de Lakua en seguridad privada es de cerca de 18 millones de euros. De estos, 8,8 millones son para vigilancia de sus propias instalaciones. Otra partida casi similar, de 8,6 millones, se destinó en 2013 a labores de escolta, mientras que 0,5 millones se adjudicaron para vigilancia de sedes de partidos.

Otro de los grandes capítulos en gastos de vigilancia privada es el de palacios de justicia y centros de menores, a los que se destinan 3,33 millones de euros, distribuidos en 2,21 millones y 1,12 millones respectivamente.

La vigilancia de los edificios del Gobierno en Gasteiz, Bilbo y Donostia supone 1,7 millones de euros anuales.

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